miércoles, 15 de febrero de 2012

Suena ruido de cadenas: estalló la burbuja.

Cordura y quimera son uno.
Toco el borde de tus labios
y reviento.
Punto a punto, sin comas,
suspensivos... la vida.
Y un árbol seco,
de la Edad Media.
La cuerda sobre sus ramas
y la viga.
Quedará en mi cabeza
(pronto ceniza morada)
el ardor que no os cuento:
las princesas y los bosques,
los desgarros de arterias en la lucha,
los grillos intentando
abrirse paso entre la sangre,
en un trigal a punto.
Cerilla, yesca,
una soga y un madero.
Y nada más.

El prisionero se ha escapado.
Vuela.
Con dos balas azules en la cabeza.
Está solo.
Atardece:
el Sol en plenitud,
el cielo en plenitud,
fuego pleno.
Hay un muerto,
en medio del llano.

Se hace el silencio.

El silencio eterno.

Nuestro silencio.

(Suena ruido de cadenas)

FIN

No hay comentarios:

Publicar un comentario